Hoy, desde milyunahistorias, os traemos una nueva recomendación cinéfila con una película que, sin duda, dejará con muchas preguntas, pocas respuestas y no te dejará indiferente. Y no es otra que «El triángulo de la tristeza». Esta película sueca está dirigida por Ruben Östlund y protagonizada Harris Dickinson, Charlbi Dean, Zlatko Buric, Dolly De Leon, Woody Harrelson se llevó la Palma de Oro en el festival de Cannes en 2022.
Sinopsis ¿De qué va El triángulo de la tristeza?
La película sigue a una pareja de modelos e influencers que van de vacaciones a un yate de lujo. Un Yate por el que desfilan personajes de lo más variopintos que dan rienda suelta a sus excentricidades de ricos. A partir de ese momento, lo que parecían unas plácidas y lujosas vacaciones, toman un giro inesperado cuando un suceso sacuda sus acomodadas vidas e invierta los roles sociales. Una sátira, afilada y llena de humor negro alrededor del mundo de los ricos.
Tres actos de tragicomedia in crescendo
La película se divide en tres actos que van in crescendo en cuanto al humor, la crítica y el desmadre. Un viaje con tres paradas que nos lleva del lujo a la precariedad, de los mayores excesos a la pobreza. Una travesía donde las clases sociales y los lugares de poder se van intercambiando poco a poco en el momento en el que a los que estaban más arriba la propia naturaleza les deja sin nada y en el peor estados posible. Los sometidos toman el poder y los poderosos se ven sumisos ante la necesidad.
De esa misma manera, los tres espacios en los que paramos tienen su propia narrativa. El primer acto con Yaya y Carl cuyo lugar y situación laboral nos muestra la lucha de poderes dentro de la pareja, con el trasfondo del mundo de la moda y metiendo de forma ingeniosa en clave de humor guiños al feminismo y su papel. El Yate donde veremos esa caída desde lo más alto del pedestal de una serie de personajes que se creen con el poder de manejar a aquellos que están a su servicio como les plazca. Finalmente, la isla, el lugar dónde de verdad los roles se intercambian y da igual de dónde vengas o lo cuanto dinero tuvieras hace un día.
Asco en medio de la abundancia
Con el segundo acto nos mete dentro de una yate donde encontraremos diferentes personajes, a cada cual más variopinto e insoportable. Un abanico con todas las más negativas ideas posibles que la gente de a pie puede tener hacia las clases más pudientes. Aquellos que no aceptan un no por respuesta. Y los antepone a la tripulación del barco, que vemos como una clase social inferior, pero que dentro de la cual hay otra clase aún más inferior. De esta manera, consigue crear un propio sistema de clases dentro de este lujoso yate.
No podriamos no hablar en este momento del papel de Woody Harrelson como un hilarante capitán de barco marxista y alcohólico. Con él, se nos regala el punto más álgido de la cinta cuando dicho capitán y un oligarca ruso discuten sobre el capitalismo y el comunismo mientras el barco cae en el declive. Una secuencia donde lo escatológico se fusiona con un humor absurdo, pero inteligente.
Una escena magistralmente dirigida, pero no apta para estómagos delicados.
Una puñalada muy directa a nuestra sociedad
Con el tercer acto llega la verdadera critica social. Es donde el director se permite darnos en la cara con la realidad sin cortarse lo más mínimo. Y no para darnos alguna respuesta, sino que busca el desprecio por el desprecio. Es especialmente crítico con el capitalismo, así como con el comunismo, para llegar a la conclusión de que realmente nada funcionaría, porque el hombre es egoísta por naturaleza.
Con la llegada a la isla, y habiendo perdido todo, se crea una nueva sociedad. Una sociedad donde sigue siendo imperiosa la necesidad de un líder. Aprovechando eso, deja clara la inutilidad de los ricos en cuanto se ven despojados de manera forzada de todo lo lujoso y lo superficial.
Conclusión
«El triángulo de la tristeza» es una película con un humor que invita a la reflexión pero de una manera no precisamente profunda. Es sarcástica, provocadora, violenta y con la necesidad de humillar pero con un trasfondo triste realmente. Es el reflejo, llevado al límite, de aquello a lo que no deberíamos aspirar a ser.
Fuentes:
http://www.elespectadorimaginario.com/el-triangulo-de-la-tristeza/
https://www.mondosonoro.com/criticas/cine-series/el-triangulo-de-la-tristeza/