Hoy, desde milyunahistorias, os traemos una nueva recomendación para los más cinéfilos: The Whale (La ballena). Dirigida por Darren Aronofsky (Cisne Negro, Mother), cuenta con las increíbles interpretaciones de Sadie Sink (Stranger Things), Hong Chau (El menú), Ty Simpkins (Insidious), Samantha Morton (She Said) y encarnando al protagonista de esta obra Brendan Fraser (La momia). Tras años desaparecido, su vuelta a la gran pantalla y su interpretación le valió una ovación de 6 minutos en el festival de Venecia y tener bastantes papeletas para llevarse el Oscar a mejor actor.
The Whale: Sinopsis
La cinta nos cuenta la historia de Charlie, un profesor con obesidad severa que vive anclado en su pequeña casa de Idaho. En un último intento de redención por las circunstancias y «errores» del pasado, busca reconectar con su hija de 17 años, Ellie. En este proceso le acompaña Liz, su enfermera, una mujer con carácter pero quien tiene una conexión especial con Charlie, Thomas, un joven miembro de una congregación religiosa que intenta salvar a Charlie a través de la religión y Mary, la ex mujer de Charlie y madre de Ellie.
Del teatro a la gran pantalla.
Lo que tal vez muchos no sepan, es que la película se basa en la obra homónima de Samuel D. Hunter, quien fue galardonado con la Beca MacArthur por su trayectoria. En su dramaturgia, el autor siempre se centra en temas como la soledad, la esperanza (y la fe) y el reto que supone saber empatizar con personajes difíciles.
“La base de muchas de mis obras es la lucha por el significado y también la lucha por la conexión entre personajes. Creo que también es un producto de mí, y no quiero ser pretencioso al respecto, viaje espiritual” Samuel D. Hunter
«The Whale» se convirtió en su obra más conocida ya que se ganó el corazón de la crítica y varios premios teatrales. El propio autor ha contado en varias entrevistas, que con esta obra tiene una relación más cercana. Cuenta sus propias experiencias personales pasadas en torno a la adicción a la comida, su orientación sexual y su relación con el cristianismo y la paternidad.
Es interesante ver como ese lenguaje más escénico se ve en el hecho de que no cambiemos de escenario en toda la obra y en la forma en la que se confeccionan los planos en determinadas escenas.
«The Whale» y el viaje a la redención
"Necesito saber que he hecho una cosa bien en mi vida".
Esta frase, cierra el trailer de la película y uno de los momentos más culmen de la misma. Como espectadores, asistimos a la vida de un hombre que poco a poco se consume a lo largo de una semana. Asistimos al viaje de redención de un hombre que consumido por la culpa y el dolor de la perdida del pasado, busca en la comida una manera de consuelo, de autocastigo, o un lugar donde echar todo lo que lleva dentro y no puede decir. Como medio para encontrar la paz antes del inevitable final, Charlie quiere recuperar su relación con Ellie, su hija, quien no se lo pondrá nada facil.
Conforme avanza la película, descubrimos poco a poco quién es Charlie detrás de esas capas de autoodio, aceptación, depresión, familia, recuerdos y dolor. Todo ello en una subida emocional gradual, que finalmente te golpea en la cara casi sin que te lo esperes.
Una lucha que es difícil de entender
Que la cinta pone parte de su foco en la «insana» relación de Charlie con la comida y con su propio cuerpo es una realidad (incluso tiene escenas que pueden ser dificiles de mirar para según que tipo de espectador). Y que esto abrirá un debate también es innegable: Es un tema delicado y complicado.
Pero, si rascamos un poquito, vemos que la obra busca que miremos más allá. Que miremos que se esconde detrás de esa ingesta incansable, a un nivel tan autodestructivo. Vemos a un hombre que está refugiando todo su dolor en lo que más tiene a mano, que es la comida. Una manera de castigo por la culpa de un pasado que ya no puede cambiar, y por el dolor hacia la perdida de una persona muy querida que ya no va a volver.
Y es allí donde se busca hacer el trabajo de empatía. Un trabajo difícil ya que te pasas gran parte de la película luchando por querer entender a Charlie, a la par que odias que se esté haciendo eso a sí mismo.
El retorno de Brendan Fraser
Si hay algo clave por lo que esta película era tan esperada, es por la vuelta a la carga de uno de los actores más queridos del cine de los 90’s y 2000’s, Brendan Fraser. No entraremos en el por qué de su desaparición, pero para aquellos que hemos crecido con sus películas nos hace felices verle renacer como actor. Renacer además de una manera tal potente. Porque lo que es innegable es que gran parte del poder de esta película es su impecable interpretación, con un papel para que el actor lo ha dado todo haciendo de este, un personaje memorable.
«People is amazing»; Conclusión
El ser humano de por si, es complicado. Tiene comportamientos y acciones que en ocasiones son difíciles de entender. Y durante toda la cinta vas teniendo ese tipo de pensamientos con respecto a todos los personajes. Solo te queda esperar y entender que a todos nos mueven nuestras propias circunstancias presentes o pasadas y que lo que para unos puede ser el final tan esperado con el que conseguir estar en paz consigo mismos (Como Charlie), para otros puede ser una manera de poder perdonar y volver a empezar de cero (Como Liz, Thomas o Ellie). Que la maldad o la bondad no pueden verse desde dos polos opuestos, ya que convergen y se cruzan haciendo que aquello que al principio parece una mala acción o una acción egoísta, tiene un fin bueno.
The Whale, no es un película facil de ver. Todos los actores hacen un trabajo interpretativo increible que te lleva por una viaje de emociones. Un viaje que tal vez a unos guste y a otros no, pero que, desde nuestra humilde opinión, creemos que merece la pena pasar.
Fuentes:
https://www.fotogramas.es/noticias-cine/a42528416/the-whale-ballena-claves-brendan-fraser/